La siesta


…y fueron pasando las horas
Y la calor tan pegajosa
Y siempre tan perezosa
Terminaron con mis dudas

El sol estaba a sus anchas,
Miraba desde lo alto
Achicharrando los campos
Y secando la laguna

Vajeaba un viento de levante
Haciendo bailar los trigos
Con el canto de los grillos
En un coro negro de cantantes

Entonces ….cerré el visillo
Me abandoné completamente
Y en un sofás … naturalmente
Me dormí como un chiquillo.

Diego, Primavera del 22

Cuadro: La Migdiata de Ramón Martín

No hay comentarios:

Publicar un comentario